- By - Juan Vargas Suarez
- 13 de enero de 2023
- Comments (0)
Casi todos los dominicanos sabemos que la familia del General Juan Pablo Duarte y Díez fue desterrada por el infame Pedro Santana, hacia Venezuela. Fue el 6 de abril de 1845 en La Guaira, ciudad portuaria donde el también proscrito caudillo fundador de la República Dominicana, abrazó a su madre, hermano y a sus hermanas. Luego viajaron hacia Caracas donde establecieron su residencia en la casa del General Mariano Díez, tío materno de Juan Pablo, quien había establecido su residencia en Venezuela desde años atrás, teniendo una participación destacada en la guerra de independencia de Venezuela, fue designado por el mismísimo Libertador Simón Bolívar como Teniente de Artillería de la Gran Colombia. La vida del General Mariano Diez no es el tema central de este artículo, así que lo dejaremos para otra publicación.
Los Duarte-Díez fijaron su residencia en Caracas y nunca regresaron a la república que contribuyeron a libertar. Ni siquiera cuando el gobierno dominicano presidido por el General Ulises Heureaux (Lilís), resolvió obsequiarles una casa a las hermanas del ilustre libertador dominicano y una pensión vitalicia para todos sus hermanos. De esta manera, las raíces de esta honrada y patriótica familia se echaron en la hermana República de Venezuela.
Uno de los hijos del General Mariano Díez, el Dr. Manuel Antonio Diez, primo hermano de Juan Pablo Duarte y Díez, a quien conoció durante su primera visita a Venezuela en 1843 y con quien posteriormente desarrolló una relación familiar de admiración y respeto muy importante e impactante en la vida del niño Manuel Antonio, sin lugar a dudas debe haber sido motivo de gran orgullo e inspiración saberse primo de uno de los libertadores de América.
Manuel Antonio Diez (en Venezuela los descendientes de los Díez perdieron el acento de su apellido en la letra i) nació el 02 de febrero de 1838 en Caracas, su madre fue la dominicana Adelaida López Umerez, hija del Licenciado Manuel López Umerez dominicano y de los buenos (quien tuvo una participación destacada junto a José Núñez de Cáceres en el glorioso amanecer del primero de diciembre de 1821, primer impulso independentista dominicano).
El joven Manuel Antonio estudió en la Escuela que regentaba el Br. Vicente Méndez, plantel que gozaba y gozó después de justa reputación, pues en él fueron educados ciudadanos que han brillado en las ciencias, artes e industrias.
Después de haber estudiado las materias adecuadas para seguir las ciencias filosóficas, siguió estas en el Colegio de la Concordia regentado por el Dr. Ezequiel Contreras; a poco tiempo se cerró dicho instituto y pasó al Colegio de Roscio del que era muy digno Director el Ing. General Juan José Aguerrevere, quien sería más tarde fundador y Presidente del Colegio de Ingenieros de Venezuela junto al alumno. Concluyó dichos estudios y se graduó de Bachiller en Filosofía el mes de julio de 1857.
Entusiasta por los estudios, siguió el curso de matemáticas en la Academia que fundó el inolvidable ingeniero Juan Manuel Cajigal. Habiendo concluido sus estudios en 1859, obtuvo el título de Teniente de Ingenieros con fecha de 15 de mayo de 1860. Al mismo tiempo que estudiaba matemáticas, siguió los estudios médicos y así se graduó de Bachiller en Medicina el día 4 de marzo de 1864.
Manuel Antonio prosiguió sus estudios en la Universidad de Caracas (posteriormente Universidad Central de Venezuela) de donde obtuvo el título de Licenciado en 1864 y de Doctor en Medicina y Cirugía el 4 de junio de 1865.
El 19 de noviembre de 1874 se casó con la señorita Isabel Tresselt, distinguida dama de la sociedad caraqueña con quien procreó tres hijos: Manuel, Isabel y Emma Lucía. Lamentablemente los tres murieron sin descendencia.
A este venezolano de sangre dominicana le tocó vivir los tiempos de la guerra civil venezolana conocida como al Guerra Federal y otras guerras civiles sucesivas de menor dimensión, lo cual lo llevó a ocupar diversos y muy importantes cargos en poco tiempo. El Dr. Manuel Antonio Diez siempre se preocupó por ser útil a sus conciudadanos y a su patria querida, por esta razón entabló amistad con el General Joaquín Crespo, quien fue condecorado como Héroe del Deber y quien en el futuro sería el hombre fuerte de Venezuela.
Entre todos los títulos que obtuvo y cargos que ocupó nos permitimos citar los siguientes:
`Ingeniero Civil y Militar desde 1860, Miembro Fundador del Colegio de Ingenieros de Venezuela, Médico Cirujano de la Universidad de Caracas (posterior UCV) 1865, Director del Hospital Militar de Caracas 1876, Coronel del Ejército Nacional de Venezuela 1876, Administrador de la Aduana Marítima del Puerto de La Guaira 1885, Senador Principal por el Estado Falcón 1886, 1er Vicepresidente del Senado de los Estados Unidos de Venezuela 1886, 1er Consejero del Consejo de Gobierno de los Estados Unidos de Venezuela 1886, Presidente Interino de los Estados Unidos de Venezuela 1886, Presidente Honorario de la Sociedad Neolatina de Caracassone, Francia, con la adjudicación de las Palmas de Oro 1896, Presidente Honorario del Instituto Filotecnico de la Carassone Francia, 1896, Ministro de Fomento 1896, Condecorado con Medalla de Oro por su gestión, Fiscal del Banco de Caracas 1897, Individuo de Número de la Academia Nacional de Historia de Venezuela 1900, Vicedirector de la Academia Nacional de Historia de Venezuela, Socio correspondiente de la Academia Nacional de Colombia 1911, Condecorado con la Medalla de Oro de Villaviciosa creada por Felipe V de España, dada por Su Majestad Don Alfonso XIII.
El Dr. Manuel Antonio Diez asumió la Presidencia de Venezuela de manera interina de manos del General Joaquín Crespo el 27 de abril de 1886, mientras el presidente electo, General Antonio Guzmán Blanco regresaba de Francia.
Haciendo gala de su faceta de político, el Dr. Diez llega al ejercicio de la Primera Magistratura del Estado debido a ser el 1er Consejero del Consejo de Gobierno de Venezuela, órgano constitucional junto con el cual el Presidente ejercía el poder ejecutivo. Los miembros de este Consejo eran electos de entre los Senadores de la República, debido a que el Dr. Manuel Antonio Diez era Senador Principal del Estado Falcón y según el historiador venezolano Tomás Polanco Alcántara “era respetado por todos por su talante equilibrado y conciliador” fue electo Nº 1 del Consejo de Gobierno de los Estados Unidos de Venezuela en 1886.
Durante su gobierno de 5 meses, la prensa, ese poder celoso siempre de las libertades públicas y eco casi siempre de la opinión, tuvo plena y amplia libertad y aun así, ésta nunca se pronunció en contra de su persona ni de sus actuaciones como Magistrado. El Dr. Diez no aprisionó a ningún ciudadano, como era costumbre en la época porque según sus palabras “estaba plenamente convencido de que al pensamiento no se le puede encadenar, y que la opinión pública es el pedestal solido de los gobiernos que atienden al progreso y bienestar de la Nación”.
El cumplimiento de las leyes fue la brújula que guiaba a su persona y al Estado venezolano durante su gestión. Conducta acorde con el Pensamiento Político de nuestro Libertador Juan Pablo Duarte expresado por éste, entre otras formas, de la siguiente manera “La ley es la regla a la cual deben acomodar sus actos, así los gobernados como los gobernantes”.
Una muestra de lo anterior fue haber rebajado su sueldo en un 25% según Decreto promulgado por el ejecutivo anterior a él. Su respeto a las leyes y su desapego a la acumulación de riqueza debe notarse como un rasgo extremadamente extraño y por tanto loable para la época ya que el Estado era administrado con poca o ninguna transparencia y donde el Presidente era un rey en todos sus poderes, menos en el nombre.
Una vez entregada la Presidencia de la República al General Antonio Guzmán Blanco, el Dr. Diez retomó su puesto en el Senado y en el Consejo de Gobierno como Nº 1 de ese organismo (que en la actualidad es equiparable a la vicepresidencia de la república) por 1 año. Luego se empleó únicamente en su profesión de médico, la cual nunca abandonó ni aun en el ejercicio de la primera magistratura del Estado.
En el gobierno del General Joaquín Crespo 10 años después, en 1896 fue designado Ministro de Fomento (en la actualidad sería una fusión entre el Ministerio de Industria y Comercio y el de Agricultura, con algunas direcciones importantes como la del Correo de Venezuela y las Aduanas del país). Por su desempeño fue condecorado con la medalla de oro al salir del ministerio.
Como escritor publicó numerosos artículos en los periódicos más importantes de la época, El Cojo Ilustrado, La Opinión Nacional, Diario de Caracas, entre otros. Algunos de estos artículos los publicaremos más adelante ya que los consideramos útiles a nuestra querida Republica Dominicana aun en la actualidad.
También escribió varios ensayos, tales como, Tratado de Alimentación, Prontuario de Salud, Narraciones Históricas y más de diez obras teatrales con las cuales buscaba educar al pueblo, tal y como lo hiciera nuestro Juan Pablo Duarte con la Sociedad La Filantrópica más de 50 años antes con fines educativos independentistas.
En uno de sus artículos en el Semanario El Progreso escribió sobre Bolívar y Duarte lo siguiente “Recuerdo con gratitud la Patria de mi padre y de mi primo el general Juan Pablo Duarte, gallardos paladines de la Independencia de la Primada de las Indias. Venezolano de nacimiento y caraqueño, me entusiasma también que la gloria del Libertador Simón Bolívar tenga muy digna representación en la hija inmortal de Cristóbal Colon; porque mi padre fue admirador y teniente del Creador de las cinco Repúblicas que adornan el continente Sur-americano”.
Resulta sorprende que un primo hermano del General Juan Pablo Duarte y Díez haya sido nada más y nada menos que Presidente Interino de los Estados Unidos de Venezuela (nombre oficial de la actual República Bolivariana de Venezuela desde 1864 hasta 1953) y que pocos dominicanos lo sepan, creemos que debe ser un motivo de orgullo para nuestro pueblo y de unidad entre ambos países. La Familia Diez, familia venezolana de origen dominicano hizo grandes aportes a Venezuela con varios de sus hijos al igual que otras tantas familias dominicanas que emigraron hacia a la patria de Bolívar en tiempos pasados.
Los hijos de Duarte y los hijos de Bolívar siempre estarán unidos pues ambos guardan en su sangre los genes del patriotismo y el fuego de la libertad.
En otro artículo profundizaremos sobre el pensamiento del Dr. Manuel Antonio Diez, por los momentos, si te consideras un patriota, te pido que difundas este articulo y que juntos nos sintamos orgullosos de la Familia Duarte-Díez.
ARCHIVOS CONSULTADOS
El autor guarda las copias de los documentos que demuestran la veracidad de todo lo aquí expresado. Estos documentos fueron recabados en:
La Biblioteca Nacional de Venezuela
Archivo General de la Nación de Venezuela
Archivo General de la República Dominicana
Archivo Histórico de la Universidad Central de Venezuela
Biblioteca de la Fundación Hermano Nectario María
Academia de la Historia de Venezuela